martes, diciembre 22, 2009

No way, José

Buscando la canción noventera que repite esta frase, encontré un interesante artículo acerca de la visión que tienen los extranjeros del sistema de previsión social usado en Chile, conocido como AFP. A continuación una traducción:


"José Piñera, ex ministro de Trabajo de Augusto Pinochet, ha pasado los últimos años en un exilio autoimpuesto en el Instituto Cato ensalzando las virtudes de la privatización del sistema de Seguridad Social de Chile. La semana pasada, la página de opinión de la editorial del New York Times le asignó espacio abundante para su rap ya familiar acerca de por qué los Estados Unidos debería seguir el modelo de Chile de empujar a los trabajadores a depender principalmente en cuentas de inversión personal para sus ingresos de jubilación. Pero sobre todo, que no proporcionó cifras sobre los hechos o lo que el resultado ha sido en Chile desde que comenzó la privatización en 1981.

Piñera no mencionó, por ejemplo, que un informe de este año por el Banco Mundial, una vez que un defensor entusiasta de privatización, expresó su decepción porque en Chile y países de América Latina la mayoría de los que siguieron sus pasos ", más de la mitad de todos los trabajadores [ están excluidos] de apariencia incluso de una red de seguridad durante su vejez ".

Otros hechos dentro de los informes recientes de Stephen J. Kay, del Banco de la Reserva Federal de Atlanta sobre la experiencia de Chile:

* Las Cuentas de inversión de los jubilados son mucho menores de lo previsto inicialmente-tan bajo que el 41 por ciento de las personas con derecho a cobrar pensiones seguir trabajando.
* Comisiones voraces y otros gastos administrativos han absorbido una gran proporción de esas cuentas. La firma de corretaje CB Capitales calculó (véase el debate idioma Inglés por Stephen Kay aquí) que cuando los gastos de comisión se tienen en cuenta en Chile, el rendimiento promedio total de las contribuciones de los trabajadores entre 1982 y 1999 fue del 5,1 por ciento-no el 11 por ciento calculado por la Superintendencia de los fondos de pensiones. Ese informe encontró que el trabajador medio habría hecho mejor, simplemente colocando sus contribuciones a los fondos de pensiones en una cuenta de ahorros.
* Los costos de la transición de pasar a un sistema privatizado en Chile un promedio de 6,1 por ciento del PIB en la década de 1980, el 4,8 por ciento en la década de 1990, y se espera un promedio de 4,3 por ciento desde 1999 hasta 2037. Estos costos son muy superiores a los previstos originalmente, en parte porque el gobierno está obligado a proveer subsidios para los trabajadores, no pueden acumular suficiente dinero en sus cuentas para obtener una pensión mínima.

El informe del Banco Mundial ha prestado especial atención a la experiencia relativamente positiva de Brasil en el alivio de la pobreza mediante reajustes en su actual programa de beneficios definidos de jubilación en lugar de perseguir la privatización. El informe concluía: "Países como Brasil que tienen bien desarrollados los mercados de capital bien puede optar por cambiar los parámetros de sus sistemas públicos de pensiones de reparto en vez de cambiar a un régimen de capitalización obligatorio." En otras palabras, tal vez no privatización sea una buena idea para los países avanzados, después de todo.

Greg Anrig es vicepresidente de programas en la Fundación Century. " Fuente del artículo aquí